PROPORCIÓN, LUZ Y ESPACIO: DONALD JUDD Y EL ENIGMÁTICO ATRACTIVO QUE ENVUELVE A MARFA

Arte, Estados Unidos
Entrevista realizada por Sarah Len
Introducción por Jill Krasny
Fotografías de Luis Garvan

Donald Judd ya era un nombre de peso en el mundo del arte cuando optó por dejar atrás Nueva York y aventurarse en el desértico oeste de Texas. Era el año 1971, y Judd estaba decidido a alejarse de la vorágine del mundo artístico después de haber construido una reputación en la década de 1960 como conocido crítico de arte y artista que trabajaba con la proporción, la luz, el espacio y objetos tridimensionales. La razón: no le agradaba cómo los museos manejaban la instalación y el transporte de sus obras, a veces confundiéndolas con simples contenedores de carga. Así que, consultando un mapa, ubicó uno de los lugares menos poblados de América, tal como su hija Rainer compartió con el New York Times, y empacó sus pertenencias. Tiempo más tarde, adquirió numerosos espacios destacados en y alrededor de Marfa, incluyendo una manzana entera y dos grandes hangares de aviones, transformándolos de acuerdo a su visión única en el proceso.

La influencia de Judd, quien falleció en 1994, sigue siendo notable en el arte contemporáneo. Basta con visitar Marfa para comprender por qué. En este lugar, se pueden visitar 10 de los misteriosos espacios de vida y trabajo del escultor estadounidense, incluyendo su biblioteca personal con más de 13,000 libros sobre una amplia gama de temas, desde arte y astronomía hasta literatura y filosofía, todo realizando previa cita a través de la Fundación Judd. Por otro lado, la Fundación Chinati, que abrió sus puertas al público en 1986, ofrece un intrigante programa de recorridos públicos, residencias de artistas, exposiciones especiales, conferencias, actuaciones y publicaciones, con el objetivo de profundizar el diálogo que Judd persiguió con pasión entre el arte, la arquitectura y el entorno natural.

Sarah Len, Editora en Jefe de MATERIA, visitó Marfa para contemplar las obras de Judd en persona y salió con una profunda comprensión de cómo Marfa influyó en su trabajo. En esta ocasión, Rainer Judd, hija de Judd, cineasta, artista y presidenta de la Fundación Judd, y Caitlin Murray, directora de Chinati, compartieron con MATERIA sus reflexiones sobre la preservación de su legado.

DONALD JUDD, 100 UNTITLED WORKS IN MILL ALUMINUM, 1982–86. PERMANENT COLLECTION, THE CHINATI FOUNDATION, MARFA, TEXAS. DONALD JUDD ART © 2023 JUDD FOUNDATION / ARTISTS RIGHTS SOCIETY (ARS), NEW YORK.

Sarah Len: Rainer, ¿qué recuerdas de la obra de tu padre cuando eras niña?

Rainer Judd: Recuerdo que a veces me regañaban un poco por correr entre hojas de triplay usando tenis. Pero lo que más recuerdo es la sensación constante de calidez. La calidez emanaba de las superficies de madera, de las hogueras nocturnas, de la buena comida, de la luz de las velas y de los colores; colores en todas partes, tanto en la comida como en los metales. Siempre había mucha belleza a nuestro alrededor.

SL: En las últimas décadas, Marfa ha pasado de ser un pueblo remoto a convertirse en un destino cultural. Rainer, ¿Puedes encaminarnos un poco para explicarnos cómo tu padre descubrió este lugar y qué lo atrajo al desierto?

RJ: La transformación de Marfa en un destino cultural no fue obra de Donald Judd ni de la Fundación Judd, sino que se produjo tras la muerte de Don, debido a diferentes oleadas de personas. Él nunca fue un promotor y no habría apoyado convertir a Marfa en una atracción turística. Estaba concentrado en su trabajo y en la creación de una experiencia profunda que involucrara arte, arquitectura, cielos oscuros y la preservación de la tierra. Elegir Marfa se debió a su falta de popularidad y escasa población.

DONALD JUDD, ARTILLERY SHED WITH 100 UNTITLED WORKS IN MILL ALUMINUM, 1982–86. PERMANENT COLLECTION, THE CHINATI FOUNDATION, MARFA, TEXAS. PHOTO BY LUIS GARVAN. DONALD JUDD ART © 2023 JUDD FOUNDATION / ARTISTS RIGHTS SOCIETY (ARS), NEW YORK.
POOL, LA MANSANA DE CHINATI/THE BLOCK, JUDD FOUNDATION, MARFA, TEXAS
COURTYARD, LA MANSANA DE CHINATI/THE BLOCK, JUDD FOUNDATION, MARFA, TEXAS. DONALD JUDD ART © 2023 JUDD FOUNDATION / ARTISTS RIGHTS SOCIETY (ARS), NEW YORK

SL: Sin duda, el desierto tiene un atractivo innegable, pero cómo crees que este entorno influyó en el proceso creativo de tu padre?

RJ: El desierto amplió notoriamente la escala de su obra. En 1980, creó una obra que medía 24 metros de largo, la cual surgió después de sus primeros años viviendo aquí de tiempo completo (aunque con viajes constantes a N.Y). Solo él podría hablar de su proceso creativo, pero sé que este literalmente se expandió, ya que tenía más espacio para todo: más espacio para las ideas, para fabricar muebles y para renovar edificios. Al igual que muchos científicos, él creía que lo que observas importa. Cuanto más podía crear y observar, más ideas podía tener.

‘Además, creía en la responsabilidad de cada generación -de cualquier cultura- por preservar los recursos para que todos puedan vivir en un mundo que respeta a su naturaleza, lleno de pensamientos brillantes y comida abundante. No es una broma y no es complicado.’

– Rainer Judd

SL: Al estar tan cerca de la frontera con México, imagino que tu padre también desarrolló una admiración por el país vecino.

RJ: Él amaba México. Incluso esperaba convencer a mi madre de dar a luz a su segundo hijo en Baja California, para que yo fuera ciudadana y él pudiera comprar terrenos allí. Sin embargo, mi madre se rebeló, ejerciendo su derecho, y me dio a luz en Nueva York, cerca de su madre y hermanas. México fue su primera elección, pero Marfa fue su solución al ser estadounidense. Él buscó por todas partes, pero le gustó la inmensidad de Marfa, amaba su belleza, su escala, el pueblo, los rancheros, la comunidad mexicoamericana y su arquitectura.

SL: Creciste en medio de los esfuerzos creativos de tu padre. ¿Cómo crees que su filosofía artística ha moldeado tu propio enfoque artístico? ¿Y quién crees que influyó en él como artista?

RJ: Él tenía una filosofía que abarcaba toda la vida, donde el arte no estaba aislado de la vida, sino conectado con todo lo demás. La belleza estaba en todas partes en Marfa, desde los detalles más pequeños hasta los paisajes expansivos. La dignidad que buscas, se la otorgas a los demás a diario. Él creía profundamente en que la ciencia importaba. Además, creía en la responsabilidad de cada generación -de cualquier cultura- por preservar los recursos para que todos puedan vivir en un mundo que respeta a su naturaleza, lleno de pensamientos brillantes y comida abundante. No es una broma y no es complicado. Solo las personas que buscan enormes ganancias confunden lo básico. Una vez le pregunté por qué existían las armas nucleares, y en resumen, dijo que se trataba de dinero.

SL: La participación de la fundación en la sostenibilidad y el medio ambiente es digna de mención. Caitlin, ¿cómo incorpora la Fundación Chinati estos valores en sus iniciativas?

Caitlin Murray: Un proyecto reciente que preveé la replantación de álamos es un buen ejemplo de nuestro compromiso con el mantenimiento de un paisaje saludable. Al este de las 15 obras sin título en concreto, Judd plantó una hilera de que corre paralela a un pequeño cauce. Los álamos que él plantó (alrededor de 1981/1982) son nativos de América del Norte, pero ya no son adecuados para nuestra región y su clima, por ende más de 20 nuevos álamos del Río Grande serán plantados en Chinati en octubre, y esta iniciativa mejorará la salud del sitio al tiempo que preservará la visión que Judd tenía para este lugar.

‘En su ensayo ‘Marfa, Texas’ (1985), Judd escribe: ‘La proporción y la escala son muy importantes. A diferencia del arte y la arquitectura comunes que se repiten constantemente. Creo que estoy trabajando directamente hacia algo nuevo que une a ambos’.’ 

– Caitlin Murray cita a Donald Judd

SL: Ver las 100 obras sin título de Judd en aluminio laminado es una experiencia bastante emotiva. Caitlin, ¿qué crees que Judd quería que sintieran los espectadores cuando vieron estas piezas por primera vez?

CM: En su ensayo ‘Marfa, Texas’ (1985), Judd escribe: “La proporción y la escala son muy importantes. A diferencia del arte y la arquitectura comunes que se repiten constantemente. Creo que estoy trabajando directamente hacia algo nuevo que une a ambos.” Aunque es difícil -es más, diría imposible- que logre mencionar algo desde esa emoción que englobe a las 100 obras sin título en aluminio laminado, creo que él quería que los espectadores experimentaran la integridad de ese ‘algo nuevo’ con pensamiento y sentimiento.

SL: Rainer, ¿cómo ves la escena artística de Marfa y las contribuciones de tu padre a ella, evolucionando en los próximos años?

RJ: La Fundación Judd es ahora la organización «abuela» de las organizaciones artísticas, y tenemos la responsabilidad de compartir los desafíos de la comunidad y facilitar oportunidades que beneficien a las personas que viven aquí y a la tierra que todos amamos. Pero los verdaderos bisabuelos son los muchos pueblos indígenas que estuvieron aquí durante miles de años antes que nosotros. Sus culturas avanzadas todavía son estudiadas por los descendientes locales, junto con la rica arqueología de la zona.

SOUTH LIBRARY, LA MANSANA DE CHINATI/THE BLOCK, JUDD FOUNDATION, MARFA, TEXAS
SOUTH LIBRARY, LA MANSANA DE CHINATI/THE BLOCK, JUDD FOUNDATION, MARFA, TEXAS

SL: Caitlin, ¿qué crees que depara el futuro para el legado de Donald Judd?

CM: Chinati comenzó con artistas determinando la ubicación y el contexto de su obra, y seguimos firmes en nuestro compromiso con este principio fundamental. Cuidar de estas obras y de los edificios que las albergan sigue siendo una prioridad. Así que continuaremos ampliando nuestra comunidad de artistas, y esperamos aumentar la accesibilidad a esta red a través de nuevas conferencias, conciertos, lecturas, eventos y talleres.

SL: Rainer, ¿qué te gustaría que fuera el legado de tu padre para artistas, diseñadores y amantes del arte?

RJ: Empoderarlos para cuidarse entre ellos, y a las generaciones pasadas y venideras. Empoderarlos a hacer arte, a hacer lo que quieran.

 

Un agradecimiento especial a Maestro Dobel Tequila por hacer posible esta entrevista.

Visita Fundación Chinati y Fundación Judd para programar un recorrido y descubrir su programa actual.

SOUTH ROOM, EAST BUILDING, LA MANSANA DE CHINATI/THE BLOCK, JUDD FOUNDATION, MARFA, TEXAS. DONALD JUDD ART © 2023 JUDD FOUNDATION / ARTISTS RIGHTS SOCIETY (ARS), NEW YORK
SOUTH ROOM, EAST BUILDING, LA MANSANA DE CHINATI/THE BLOCK, JUDD FOUNDATION, MARFA, TEXAS. DONALD JUDD ART © 2023 JUDD FOUNDATION / ARTISTS RIGHTS SOCIETY (ARS), NEW YORK