TAQUERÍA GABRIEL Y EL ARTE DEL RÓTULO

La Taquería Gabriel es una taquería tradicional mexicana situada en la colonia Cuauhtémoc de la Ciudad de México. Los vibrantes letreros pintados a mano, las mesas estilo diner, las brillantes paredes de azulejos blancos y los letreros de neón terminan por dar vida a la personalidad de la Taquería Gabriel. También es deliciosa, ya que ofrece la experiencia clásica del norte de México y un menú sencillo de tacos al carbón, salsas, cerveza y versiones frescas de las bebidas tradicionales. El branding de Panamá Studio, un estudio de diseño multidisciplinar con sede en la ciudad de México, se centra en la modernización de los estilos gráficos mexicanos y sus características tradicionales. El estudio centró su investigación para el proyecto en la tradición de la señalización callejera pintada a mano que surgió a mediados del siglo XX. El estilo gráfico llamativo, colorido y a menudo ingenioso se denomina rótulo y marca el paisaje visual y la identidad cultural tanto en las grandes ciudades como en los pueblos rurales de todo México.

El rótulo se popularizó tras la Revolución Mexicana y el auge económico capitalista que le siguió. Los pequeños negocios necesitaban atraer clientes. Los mismos propietarios pintaban frases inteligentes o indicaciones literales en las fachadas y escaparates de sus tiendas utilizando colores brillantes y humor como reclamo. El rótulo también se reproduce en los muros de hormigón a lo largo de las autopistas con mensajes que van desde anuncios hasta eslóganes de campañas políticas. La profesión de rotulista se desarrolló como respuesta, convirtiéndose en los primeros diseñadores gráficos y publicistas creativos de México.

MATERIA habló con Isaias Salgado Del Pilar, un maestro rotulista cuya carrera abarca más de 30 años. La profesión suele ser hereditaria, así que, como muchos, a los 17 años Isaías entró como aprendiz en el taller de su tío en la Colonia Exhipódromo de Peralvillo, no lejos del infame mercado de La Lagunilla. Isaías estudiaba Bellas Artes en la universidad, por lo que sus dotes se prestaban naturalmente al trabajo elegante del oficio. Los estilos gráficos y las influencias que vemos hoy en día pueden rastrearse en parte gracias al Manual de Speedball publicado en México en 1972. El manual de instrucciones fue utilizado y aún es referenciado por los Rotulistas para aprender y dibujar distintos estilos de tipografía como la helvética, la brush, la gótica, la old english. En los años 80, cuando Isaías comenzó, recuerda que la ciudad estaba llena de talleres. En los 90 la competencia se sumó a otro boom y su tío le animó a ir a trabajar con otros maestros para experimentar otros estilos. Pero en los 2000, con la introducción del diseño gráfico digital y de materiales contemporáneos como los vinilos y las lonas, el arte del rótulo empezó a caer en picado. El panorama profesional y el negocio de Isaías son muy diferentes de lo que fueron en su día. Hoy colabora con artistas como la diseñadora Carla Fernández, Pedro Reyes y últimamente con Netflix. Sin embargo, el medio es muy diferente: pintar sobre tela, un mural o ejecutar una valla publicitaria.

La nostalgia por la artesanía se puede ver en todo México en colonias como Cuauhtémoc, por la preservación intencional en la comunidad de artistas, o entre la escena de los vendedores ambulantes y los pequeños negocios básicos. Sin embargo, existe una clara disonancia entre el diseño gráfico contemporáneo al adentrarse en zonas más rurales, donde el fervor por la gráfica moderna se aleja de la identidad cultural y la tradición.